Competente

Lo que es: Una persona competente posee las habilidades, conocimientos y actitudes necesarias para realizar su trabajo eficazmente. Por qué importa: La competencia en los empleados es crucial para el éxito de la organización, ya que asegura que las tareas y responsabilidades se realicen con un alto nivel de eficacia y eficiencia.

Capaz. Se refiere a una persona o una cosa que tiene las habilidades, conocimientos o capacidades necesarias para realizar una tarea o cumplir con una responsabilidad.

Desde un punto de vista empresarial, un ejemplo de una persona competente podría ser un programador con experiencia en varios lenguajes de programación, que es capaz de resolver problemas complejos y trabajar de manera independiente en proyectos. Esta persona podría ser considerada competente ya que tiene las habilidades necesarias para cumplir con sus responsabilidades y contribuir al éxito del proyecto.

Otro ejemplo podría ser un gerente con habilidades de liderazgo sólidas y experiencia en la gestión de equipos. Este gerente podría ser considerado competente ya que tiene las habilidades necesarias para motivar y guiar al equipo hacia el logro de metas y objetivos.

En resumen, la capacidad para cumplir con las responsabilidades o tareas necesarias para el desempeño laboral se considera como una competencia adecuada o competente

Las cuatro fases de la competencia son:

  1. Adquisición: En esta fase, se adquieren las habilidades, conocimientos y experiencias necesarias para realizar una tarea o cumplir con una responsabilidad. Esto puede incluir la formación, la educación, la práctica y el desarrollo de habilidades específicas.
  2. Desempeño: En esta fase, se aplican las habilidades, conocimientos y experiencias adquiridos para realizar una tarea o cumplir con una responsabilidad. Esto puede incluir la ejecución de tareas específicas, la toma de decisiones y el trabajo en equipo.
  3. Mejora: En esta fase, se busca constantemente la mejora continua en el desempeño. Esto puede incluir la evaluación del desempeño, la retroalimentación y el análisis de datos para identificar áreas de mejora y desarrollar planes de acción para lograrlas.
  4. Optimización: En esta fase, se alcanza el rendimiento óptimo en el desempeño. Esto puede incluir la implementación de mejores prácticas, la innovación y la colaboración para lograr metas y objetivos.

Es importante tener en cuenta que estas fases no son lineales y pueden ocurrir de manera simultánea. Por ejemplo, mientras se está ejecutando una tarea, se pueden identificar áreas de mejora y trabajar en ellas al mismo tiempo.