Hoy, ¿cuántas veces te has mordido la lengua?
¿Por qué lo haces? Piénsalo. Pues bien, aquí va un refrán cortesía de mi madre que yo uso a menudo y que me ayuda mucho:
«Mejor que te llamen descarado a que te llamen idiota»
Hablar con franqueza es una habilidad básica, especialmente si eres CEO o dueño de negocio. No se trata de ser agresivo, sino de ser honesto y persuasivo con tus palabras. Básico si quieres tener personas que te ayuden a ganar dinero y hacer crecer tu negocio.
Tim Ferriss nos enseñó con su bestseller «La Semana Laboral de 4 Horas», que la gente de dinero domina las conversaciones incómodas que son aquellas que, para que nos entendamos, nos sacan de nuestra zona de confort. El bueno de Tim dice en su libro que «al menos hay que tener 10 al día», ¡10! ¿Tu cuantas tienes?
Por si fuera poco, Netflix no solo nos ha cambiado la manera de consumir series y películas, sino que ha lanzado un mensaje claro al mundo: la transparencia comunica poder. Sí, porque hoy en día ser directo y auténtico es la nueva estrategia de liderazgo.
Te doy 10 ejemplos rápidos de conversaciones incómodas que uso a menudo, en el contexto del trabajo y en la vida privada. A mí me sirven y que me apetece compartir. Estoy seguro que te serán familiares. Mándame alguno de los tuyos a hola@alvaronavarrete.com y los comparto. ¡Vamos al lío!
En el trabajo:
Negociar un Aumento de Salario:
- Empleado: «Javier, ¿tienes un momento? Me gustaría hablar sobre mi papel en la empresa y cómo veo mi futuro aquí.»
- Jefe: «Claro, ¿qué tienes en mente? ¿Qué has pensado?»
- Empleado: «He estado dándole vueltas sobre mi contribución en los últimos proyectos y creo que he aportado un valor más qeu relevante. Estoy interesado en hablar contigo y revisar mi sueldo. ¿Qué piensas?».
Contribución en Sociedad: Ganamos lo mismo pero yo aporto más…
- Socio 1: «Creo que deberíamos hablar sobre nuestra contribución a la empresa. Siento que estoy aportando más al resultado final y me gustaría ver cómo podemos equilibrar eso.»
- Socio 2: «Entiendo tu punto de vista. Revisemos las cifras juntos y hablemos de cómo podemos ajustar las cosas.»
Feedback Constructivo: Ante un trabajo de cualquier compañero o proveedor…
- Colega 1: «María, ¿te parece si hablamos sobre el informe del último proyecto?»
- Colega 2: «Sí, claro, ¿qué pasa?»
- Colega 1: «He notado algunos errores que se repiten y creo que podríamos mejorar el proceso. ¿Podemos revisarlo juntos para asegurarnos de que todo esté en orden para la próxima vez?»
Hablar en exceso durante el Trabajo: Es que no calla ni debajo del agua…
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- Empleado 1: «Ana, valoro nuestras charlas, pero hay momentos en los que realmente necesito enfocarme. ¿Podríamos intentar mantener el área de trabajo más tranquila durante las horas clave?»
- Empleado 2: «Entiendo, lo siento si te he distraído. Vamos a hacer eso.
En la vida privada:
Establecer Límites Familiares: Fíjate me pide y me debe dinero y, ¡va y se cambia el coche!
- Familiar 1: «Carlos, ya sabes que siempre he estado aquí cuando me has necesitado, pero necesito hablar contigo sobre el tema del dinero.»
- Familiar 2: «¿Ha pasado algo?»
- Familiar 1: «No es fácil para mí decir esto, pero creo que no podré seguir prestando dinero. Tengo que empezar a priorizar mis propias finanzas y metas.»
Tareas Domésticas: Seguro que has pensado aquello de «A mi también me gusta vivir en un hotel».
- Pareja 1: «Me he sentido un poco sobrecargado con las tareas de casa últimamente. No se trata de ayudar sino de que cada uno haga lo que dijimos que haría. ¿Crees que podríamos distribuir mejor las responsabilidades? ¿Qué te parece?»
- Pareja 2: «Tienes razón, deberíamos equilibrarlo más. Hagamos un horario que funcione para ambos.»
Expresar Sentimientos en una Relación: Me da que nos estamos distanciando…
- Pareja 1: «Luisa, últimamente he estado sintiendo que nos estamos distanciando un poco. ¿Tienes un rato para que hablemos de nosotros?»
- Pareja 2: «Por supuesto, ¿qué te preocupa?»
- Pareja 1: «Siento que necesitamos más tiempo de calidad juntos. Nuestros trabajos son importantes, pero también lo es nuestra relación, y me gustaría encontrar un mejor equilibrio.»
Ruido de Auriculares: ¡Qué coñazo de ruido!
- Colega 1: «Pedro, me he dado cuenta de que a veces el volumen de tus auriculares es bastante alto. ¿Te importaría bajarlo un poco? Es que a veces me cuesta concentrarme.»
- Colega 2: «Vaya, no me había dado cuenta. Claro, lo bajo ahora mismo.»
Pagar el Café: Siempre acabo pagando yo.
- Amigo 1: «Oye, Luis, me he fijado que cuando salimos, suelo ser yo quien paga el café. ¿Te parece si la próxima vez invitas tú?»
- Amigo 2: «¡Vaya! No me había dado cuenta. Por supuesto, la próxima ronda corre por mi cuenta.»
Reponer Consumibles: Siempre me toca a mi. ¡Estoy harto!…
- Empleado 1: «He notado que a veces se acaban los consumibles como el papel y el tóner y no se reponen. ¿Podemos hacer un sistema para asegurarnos de que quien los use los reemplace?»
- Empleado 2: «Buena idea, podría encargarme de revisarlo semanalmente para que no nos falte nada.»
En la vida privada:
Las mariposas en el estómago son energía pura, úsalas. Lo dicho, ya sabes que cuando no circula el agua, se pudre. Haz que circule y mantén todas las conversaciones incómodas que puedas. Empieza poco a poco y hazlo educadamente. Todo se aprende. Al fin y al cabo, cuando se tiene confianza con una persona, el fondo importa más qeu la forma y comunicar con transparencia no es más que otra herramienta de la Ultra Productividad.
Felíz día y no olvides que la mejor forma de aprender es haciendo;)
